La higiene ambiental con la purificación del aire interior reduce los síntomas de alergia. Y es que este problema de salud, por lo general, está relacionado con la presencia de partículas (alérgenos) en el ambiente. Así, el número de personas que lo padece es cada vez mayor.
De hecho, es habitual encontrar a muchas personas con síntomas durante los cambios de estación debido al polen, en lugares donde hay pelos de animales, polvo, ácaros… Sobre todo en sitios con ambientes cerrados y que no se limpian y desinfectan en profundidad.
Además, el aumento de contaminantes en la atmósfera potencia los síntomas de las alergias y hace que se sufran de forma más severa. Lo que es muy incómodo cuando ocurre en el puesto de trabajo. Ya que afecta a la productividad e incluso puede llegar a ocasionar una baja laboral.
Sin embargo, la purificación ambiental puede ayudarte a combatir los síntomas de la alergia. ¿Quieres descubrir cómo? A continuación te lo explicamos.
La alergia es una reacción defensiva del organismo que se produce cuando los alérgenos y ciertas partículas presentes en el ambiente entran en el interior del cuerpo (bien por la boca, la nariz o la piel).
Cuando pasa esto, el sistema inmune reconoce esas sustancias como extrañas e intenta neutralizarlas. Pero los mecanismos que utiliza para hacerlo son dañinos para el propio organismo. Y causan los síntomas de la alergia.
Por ejemplo, la alergia a agentes ambientales puede ocasionar tos, moqueo, rinitis, ojos rojos, lagrimeo, picor y congestión nasal, estornudos, irritabilidad, sensación de ahogo, asma, dolores musculares, malestar general, etc.
Un método muy eficaz para aliviar y evitar los síntomas de las alergias respiratorias es purificar el aire del ambiente. Es decir, mejorar la calidad de la higiene ambiental. De hecho, una buena forma de comprobar si los síntomas se deben a alergias respiratorias es purificar el ambiente y ver si los síntomas remiten.
Aunque en la calle no puedes controlar el nivel de las partículas causantes de la alergia, sí puedes hacerlo en ambientes cerrados (oficinas, edificios, etc.) mediante la aplicación de purificadores de aire.
En función de tus necesidades, puedes elegir el sistema de higiene ambiental más adecuado para ti.
Se instalan para atrapar los contaminantes que se encuentran en suspensión en el aire dentro de espacios cerrados, ya que contienen un filtro HEPA capaz de reducir la contaminación del aire un 99,97 %.
Son equipos sencillos y versátiles. Y el aire solo tiene que pasar a través del filtro donde quedan atrapados los alérgenos, partículas de polvo, suciedad, aerosoles, bacterias y virus. Aunque este filtro se tiene que cambiar cada cierto tiempo, logra mantener el ambiente limpio y agradable.
Los ozonizadores aprovechan el gran poder oxidante del ozono para desinfectar e higienizar el ambiente. Producen el gas de forma artificial (a través de pequeñas descargas eléctricas) y lo liberan de forma controlada.
Así, también pueden colaborar eliminando hongos que ocasionan algunas reacciones alérgicas y desinfectando el ambiente y las superficies en espacios cerrados.
El ozono se considera uno de los agentes desinfectantes más potentes. Ya que es capaz de eliminar contaminantes del ambiente y el 99 % de los microorganismos (bacterias, virus, mohos, hongos, etc.).
Así, se garantiza un ambiente antiséptico, fresco y agradable. Por ello, es cada vez más habitual encontrar ozonizadores y purificadores de aire en oficinas y lugares de trabajo. Ya que trabajar en estas condiciones aumenta la productividad.
Además, el ozono es inocuo y no tiene efectos perjudiciales para la salud (siempre que se utilice siguiendo las indicaciones de profesionales). Y mezclado con agua, se usa como método de limpieza y desinfección para todo tipo de superficies.
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