El desarrollo, a lo largo de las últimas décadas, de la conciencia medioambiental y la búsqueda de un futuro más sostenible se están convirtiendo en dos factores determinantes en las formas de operar en multitud de sectores e industrias.
El agua, como recurso esencial y escaso, ocupa una posición preeminente en la lucha contra el cambio climático y en la reducción de la huella ecológica de nuestras actividades. A pesar de ser renovables, los recursos hídricos suelen estar sometidos a una gran presión derivada de la creciente demanda que generan. En muchas ocasiones esto desemboca en la sobreexplotación y la contaminación de esos recursos, lo que suele tener como consecuencias una pérdida considerable de la calidad del agua y, en los casos más graves, puede llegar incluso a provocar la pérdida de acuíferos, manantiales, ríos, u otras fuentes de abastecimiento.
La capacidad de reciclaje del agua a través del uso de nuevas tecnologías como los tratamientos con ozono, permite la reutilización de estos recursos, lo que tiene como consecuencia una importante reducción del impacto ambiental en este sentido.
El uso de ozono como desinfectante viene desplegando su potencial en diversidad de ámbitos, desde el sector de la alimentación, hasta la industria, pasando por la restauración, la agricultura o los servicios de limpieza, entre otros. Los procesos de desinfección de aguas se enmarcan como otro de los entornos en los que el ozono puede aportar soluciones de saneamiento y purificación de garantías.
A través del uso de estos innovadores sistemas lograremos transformar las aguas residuales en aguas puras, inocuas para la salud humana y también para el medio natural. Gracias a ello, esas aguas residuales podrán reutilizarse —dependiendo del grado de pureza que alcancen a raíz de la desinfección, la naturaleza de las mismas, y su procedencia— para diversidad de propósitos, desde riegos agrícolas o procesos industriales, hasta la recuperación de lechos acuíferos, llegando incluso a poder a abastecer a la población con agua potable.
La desinfección de aguas residuales a través de tratamientos con ozono ofrece una larga lista de ventajas que convierte a este método en una solución integral de lo más efectiva, así como un tratamiento complementario a otros sistemas (como uso de luz ultravioleta o la ósmosis inversa) que ayudará a acelerar y completar los procesos de limpieza y desinfección.
Entre los beneficios principales podemos encontrar los siguientes:
● El ozono es un desinfectante eficaz de amplio espectro que ofrece una gran solución de purificación ya que es capaz de esterilizar el agua sin restarle calidad ni alterar el equilibrio microbiológico.
● Se trata de una alternativa limpia y eficiente que supone un ahorro energético y de agua considerable (superior incluso al 60%). No genera ningún tipo de residuo perjudicial para la vida de las personas o del entorno vegetal y animal, por lo que contribuye a crear ecosistemas más habitables y seguros.
● Además, su coste es asequible y no requiere de grandes instalaciones, mecanismos complicados o procedimientos complejos. En las manos de un equipo especializado, los procesos de tratamiento de aguas con ozono son una opción relativamente sencilla que ofrece resultados contrastados sin grandes alteraciones.
La desinfección de aguas residuales mediante el uso de ozono es, como vemos, un sistema muy adecuado si queremos reducir el impacto medioambiental de nuestras actividades diarias (tanto a nivel industrial o empresarial como domiciliario), y ser más sostenibles y eficientes en las tareas de sanitización de agua.
Esto se debe a que, además de tratarse de un tratamiento inofensivo que no requiere sustancias químicas nocivas ni genera subproductos tóxicos como otros sistemas tradicionales de tratamiento de aguas grises y negras, tiene la capacidad de reducir el consumo de recursos energéticos e hídricos notablemente en el proceso de purificación del vertido. El agua resultante contará con todas las garantías de limpieza y desinfección, ya que la capacidad de oxidación de materia orgánica que puede lograr el ozono es muy potente.
El tratamiento con esta substancia, en resumidas cuentas, disminuirá la carga orgánica contenida en el agua, a la vez que elimina los olores y colores que los microorganismos generan.
Certificado para usos ecológicos en agricultura, ganadería, e higiene alimentaria: limpieza y desinfección de instalaciones de riego y herramientas de agricultura, desinfección de equipos, e instalaciones de ozono con gas y agua ozonizada; desinfección de equipos, recipientes, utensilios para consumo, superficies o tuberías relacionados con la producción, almacenamiento, transporte o consumo de alimentos, o piensos (incluida el agua potable) para personas, animales; impregnar materiales que puedan estar en contacto con alimentos…
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