El ozono se ha destapado como una solución de gran eficacia y alta rentabilidad para el sector de la hidroponía. Esta tecnología contribuye de manera notable a generar las condiciones idóneas para este tipo de cultivos.
Utilizando los métodos de ozonización, garantizaremos la inocuidad de la solución nutritiva utilizada para cultivar las plantas mediante esta técnica, desinfectándola completamente sin generar residuos o subproductos tóxicos que puedan resultar perjudiciales para los cultivos, y también para los trabajadores de la explotación.
Además de eliminar los microorganismos presentes en la solución acuosa preparada para la producción, la técnica del ozono en cultivos hidropónicos ha mostrado buenos resultados en relación al aumento del tamaño de las plantas, de sus flores y sus frutos, así como en cuanto a la resistencia a enfermedades. También ha ayudado a cosechar cultivos con gran sabor y aspecto en plazos más reducidos que utilizando los sistemas tradicionales.
Antes de continuar, repasemos el concepto de hidroponía. ¿A qué nos referimos cuando hablamos de esta técnica? El término tiene su origen en la conjunción de dos palabras griegas que significan agua y trabajo o labor, así que vendría a referirse a algo como “Trabajo en agua”.
Se trata de una buena indicación del procedimiento en cuestión porque éste usa soluciones acuosas en las que se disuelven los nutrientes necesarios para el soporte de la raíz de las plantas y el desarrollo de las mismas. Es, dicho de otra forma, un método de cultivo que se caracteriza por sustituir los sustratos típicos (tierra, compost, etc.) o bien por sustratos de otro tipo y agua enriquecida con soluciones minerales, o bien solamente por agua. Esto, como podemos imaginarnos, pone de manifiesto la importancia de la calidad de agua para el correcto funcionamiento de los procesos y el éxito de las cosechas.
Entre las principales ventajas de este método de cultivo se cuenta la limpieza, sencillez y bajo coste del sistema, así como la aptitud del mismo tanto en grandes explotaciones como en cultivos a pequeña escala, donde puede complementar a otras formas de cultivo como los cultivos en invernadero.
El principal problema que presentan este tipo de cultivos es que, al carecer de tierra u otros tipos de sustrato, no puede ofrecer una respuesta inmunitaria adecuada en caso de bajada de defensas o presencia de agentes patógenos nocivos.
A esto hay que añadir que se trata de plantas que usan una cantidad muy concreta de sales minerales para alimentarse y crecer en cada etapa de su desarrollo.
Si a esto le sumamos la necesidad de un riego continuo e idóneo para cada variedad, tenemos que se trata de un método que requiere un control muy estricto y preciso de los procesos.
En este sentido, contar con un sistema de desinfección como el que proporciona el ozono, que nos asegura una desinfección completa y una calidad del agua constante, puede suponer la diferencia entre un cultivo hidropónico satisfactorio y otro que no consiga salir adelante.
● El ozono proporciona una solución muy bien adaptada a esta técnica ya que ayuda a mantener un entorno purificado que facilitará el control y el seguimiento de los procesos, y lo hará, además, de manera sostenible y segura.
● Además de una desinfección completa y rápida, el ozono es capaz de aumentar el nivel de oxígeno, lo cual es beneficioso para el correcto crecimiento de las plantas; no genera residuos tóxicos, es decir, no contamina; tiene un consumo energético bajo; y es un procedimiento sencillo de controlar y automatizar.
● No necesita transporte o almacenamiento, por lo que no incurriremos en gastos adicionales en este sentido.
Se trata, en definitiva, de un sistema sencillo y poco costoso en términos tanto de tiempo como económicos y de consumo, muy propicio en el sector de la hidroponía gracias al uso de un gas medioambientalmente seguro, y a unos resultados —siempre y cuando el proceso se lleve a cabo por manos de expertos cualificados— demostrados y de garantías.
Es, por tanto, una auténtica revolución a tener muy en cuenta en un sector, como es el sector agrícola, en el que el uso y sobreuso de productos químicos y técnicas clásicas poco respetuosas con el medioambiente han ido degradando y agotando progresivamente el suelo y produciendo productos de menor calidad, además de generar consecuencias nefastas para entornos y ecosistemas naturales de variada índole.
Certificado para usos ecológicos en agricultura, ganadería, e higiene alimentaria: limpieza y desinfección de instalaciones de riego y herramientas de agricultura, desinfección de equipos, e instalaciones de ozono con gas y agua ozonizada; desinfección de equipos, recipientes, utensilios para consumo, superficies o tuberías relacionados con la producción, almacenamiento, transporte o consumo de alimentos, o piensos (incluida el agua potable) para personas, animales; impregnar materiales que puedan estar en contacto con alimentos…
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