Eliminar el mal olor procedente de las tuberías es un aspecto fundamental para garantizar el bienestar de nuestros espacios. Estos olores generan malestar en las personas y pueden llegar a ser muy incómodos, sobre todo cuando aparecen en baños y cocinas, y especialmente cuando se extienden por el resto de zonas adyacentes.

Se trata de un suceso muy común que puede afectar, por ejemplo, a la sala de un restaurante, a nuestras oficinas o a las habitaciones de hotel, etc. Además, hay que tener en cuenta que los olores que salen de las tuberías no son solo desagradables, también provocan espacios interiores poco saludables.

De hecho, el olor indica la presencia de microorganismos y compuestos contaminantes en el ambiente. Y es que por los desagües de las cocinas y aseos de bares, restaurantes, cafeterías, clínicas y casas se eliminan todo tipo de residuos químicos y orgánicos (jabones, detergentes, pelos, restos, etc.).

¿Quieres eliminar el olor en las tuberías? A continuación te explicamos cómo puedes hacerlo para crear un ambiente saludable y libre de malos olores.

Causas del mal olor en las tuberías

Todos los residuos que se eliminan por las tuberías no se disuelven en agua. De manera que se depositan y acumulan en las cañerías. Así, forman una capa de materia orgánica y contaminantes químicos en descomposición que favorece el desarrollo de microorganismos.

La acción de estos microorganismos libera moléculas con compuestos azufrados como el sulfuro de hidrógeno (responsable del olor a huevo podrido), amoniaco o indol (olor picante, fecal, nauseabundo), ácidos acético y butírico (olores a rancio, vinagre) y aldehídos y cetonas (olores ásperos y picantes).

También hay que destacar que en ocasiones la escasa ventilación y renovación del aire suma la presencia de otros compuestos generados en el propio local, como por ejemplo, los que se producen en la cocina de un restaurante durante la preparación de comida.

Por lo tanto, si quieres crear un ambiente agradable y saludable, tienes que eliminar los malos olores desde su origen.

Elimina el olor en tuberías con ozono

La forma tradicional de tratar el problema del olor en las cañerías es mediante el uso de productos químicos y disolventes como la lejía, el amoniaco o el cloro. Sin embargo, estas sustancias dejan residuos tóxicos muy perjudiciales para el medio ambiente.

De hecho, son productos tan corrosivos que también degradan las paredes de las tuberías y generan olores fuertes y poco agradables. Además, su efecto es limitado y requiere aplicaciones frecuentes para conseguir una desinfección efectiva.

Sin embargo, el ozono ofrece un gran poder biocida (capaz de eliminar el 99% de los microorganismos) y no genera ningún tipo de subproducto tóxico o contaminante. Además, se puede aplicar de forma directa en las tuberías y para purificar el aire interior en la cocina, aseos, sala del restaurante, pasillos, etc.

Por lo que es una solución mucho más adecuada.

¿Por qué es tan eficaz para eliminar olores?

El ozono se produce en el momento de uso a través de equipos generadores de ozono (ozonizadores). Así, se puede liberar de forma controlada en agua (agua ozonizada) para la desinfección total de las tuberías, o en forma de gas al ambiente para crear una sensación fresca y agradable en espacios cerrados.

A diferencia de los productos químicos usados para eliminar olores, el ozono no cubre el mal olor, sino lo que lo destruye. Gracias a su poder oxidante, elimina la carga microbiológica (bacterias, virus, mohos) responsable de los olores de la tubería y se descompone en oxígeno. Por lo que es respetuoso con el medio ambiente.

Ventajas de usar ozono para eliminar malos olores en las tuberías

Por lo tanto, gracias al proceso de oxidación del ozono se destruyen los microorganismos (virus, bacterias, mohos, hongos, etc.) y los contaminantes de las tuberías. Así, el uso de ozono te ofrece una serie de ventajas además de eliminar olor en tuberías:

• Higienización completa: los equipos de ozono son muy versátiles y permiten aplicar el gas en las tuberías y en el ambiente de cualquier estancia (cocinas, baños, salas, gimnasios, etc.).
• Destrucción del agente causante del mal olor. Otras soluciones químicas enmascaran el olor, pero no solucionan el problema.
• Es un método sostenible y respetuoso con el medio ambiente. No genera ningún riesgo ni para los ecosistemas naturales ni para la salud de las personas.

En resumen, el uso del ozono permite eliminar el olor de las tuberías sin recurrir a peligrosos productos químicos poco eficaces contra las biopelículas que se forman en las tuberías.

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